Los Riesgos de No Realizar Mantención Anual al Calefont: ¿Por Qué No Debes Ignorarlo?
Los Riesgos de No Realizar Mantención Anual al Calefont: ¿Por Qué No Debes Ignorarlo?
El calefont es uno de los artefactos más esenciales en nuestras casas. Ya sea para darnos una ducha caliente o lavar la loza, lo usamos casi a diario sin pensarlo demasiado. Pero el verdadero problema llega cuando comienza a fallar y deja de funcionar como debería. En ese momento, nos vemos obligados a buscar a alguien que lo revise y le haga la mantención que necesita, o en el peor de los casos, tener que reemplazarlo por uno nuevo.
1. Riesgo de Fugas de Gas o Monóxido de Carbono
Uno de los mayores peligros de un calefont mal mantenido es la posibilidad de fugas de gas o monóxido de carbono. Si las conexiones no están en buen estado o si el equipo presenta obstrucciones, puede haber escape de gases peligrosos. El monóxido de carbono es inodoro e incoloro, lo que lo convierte en un asesino silencioso.
¿Sabías que las fugas de monóxido de carbono pueden causar intoxicación grave o incluso ser letales? Este gas tóxico puede acumularse en el hogar, provocando síntomas como dolores de cabeza, mareos, confusión e incluso la muerte en casos extremos. Mantener el calefont en buen estado es fundamental para evitar este tipo de accidentes.
2. Mayor Consumo Energético y Aumento en las Facturas
Un calefont que no recibe el mantenimiento adecuado puede volverse menos eficiente con el tiempo. La acumulación de sarro en las tuberías o la corrosión en los componentes internos hace que el equipo tenga que trabajar más para calentar el agua, lo que aumenta el consumo de energía.
Consecuencia directa: facturas de gas o electricidad más altas. Un mantenimiento regular ayuda a mantener el equipo funcionando a su máxima eficiencia, reduciendo los costos a largo plazo y haciendo que tu hogar sea más amigable con el medio ambiente.
3. Daños en el Equipo y Costosas Reparaciones
La falta de revisión y limpieza puede acelerar el desgaste de los componentes del calefont, lo que aumenta el riesgo de fallos mecánicos o eléctricos. Elementos como las válvulas de seguridad, los termostatos o las piezas de conexión pueden deteriorarse más rápido sin una inspección adecuada.
El resultado puede ser un equipo que deja de funcionar en el peor momento posible, especialmente en invierno cuando más se necesita. Además, reparar un calefont averiado suele ser mucho más costoso que realizar un mantenimiento preventivo anual. En algunos casos, la falta de mantención podría incluso llevar a la necesidad de reemplazar el equipo por completo.
4. Riesgo de Quemaduras y Accidentes
Un calefont en mal estado puede no regular adecuadamente la temperatura del agua, lo que genera cambios bruscos entre agua demasiado fría o extremadamente caliente. Esto puede resultar en quemaduras accidentales, especialmente en hogares con niños o personas mayores.
Un profesional puede ajustar y calibrar correctamente el termostato del calefont, asegurando que la temperatura del agua sea la adecuada y no represente un peligro para los miembros del hogar.
5. Acumulación de Sedimentos y Sarro
El agua que utilizamos, especialmente en zonas con alta dureza, contiene minerales como el calcio y el magnesio que pueden acumularse en las tuberías y en el sistema del calefont. Con el tiempo, esta acumulación de sedimentos puede obstruir el paso del agua y reducir la eficiencia del equipo.
La acumulación de sarro no solo afecta el rendimiento del calefont, sino que también puede provocar daños irreparables en sus componentes. Si no se elimina regularmente mediante un mantenimiento adecuado, el equipo puede verse forzado a trabajar más duro, lo que aumenta el desgaste y reduce su vida útil.
6. Pérdida de Garantía del Fabricante
Muchos fabricantes de calefonts requieren un mantenimiento regular como condición para mantener la garantía del producto. Si no se realizan las inspecciones anuales, podrías perder esta cobertura, lo que significa que cualquier reparación o reemplazo que necesites en el futuro tendrá que salir de tu bolsillo.
Mantener al día el calendario de mantenimiento no solo alarga la vida útil del calefont, sino que también asegura que puedas acceder a la garantía si algo falla.
La Seguridad y el Ahorro Empiezan con el Mantenimiento
Un calefont es una pieza clave en el hogar que no se puede dejar de lado. Ignorar su mantenimiento anual no solo aumenta el riesgo de fallos y accidentes, sino que también puede llevar a un mayor consumo de energía y reparaciones costosas. Importante es saber que, si bien las mantenciones no son parte de las garantías de los distribuidores y marcas, el que esta sea no sea realizada por un ‘Instalador Autorizado por la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC)’ es causante de la pérdida de ella.
Todo trabajo, modificación o instalación debe ejecutarse de acuerdo al Decreto Supremo Nº66.
Con LiLi, puedes encontrar expertos certificados en calefonts listos para realizar una revisión completa y asegurar que tu equipo funcione de manera óptima. No esperes a que ocurra una emergencia: programa tu mantención anual hoy mismo con LiLi y protege tu hogar de posibles riesgos.